jueves, 11 de octubre de 2007

Tico, jalar, presa, pichel, gradas, jocotes...

http://www.youtube.com/watch?v=MPlBMs_XQ_4

Buenas madrugadas, Jordi en América ha fidelizado la costumbre de dormir poco y despertarse cuando aún no han puesto las calles, el rey del jet lag.
Hoy voy a comentar un poco cómo es esto, the land called Costa Rica.

San José es una ciudad fea, algo honesta y tajantemente reconocido por ellos mismos. Una urbe forzada y en desarrollo en plena naturaleza, con mucho color de asfalto y caos bananense. Aquí le llaman Chepe, bonito segundo nombre para una ciudad.
Lo más seguro que Chepe sea lo peor del país, donde se vertebra la vida moderna, con sus vicios, prisas y emulaciones de "esas otras ciudades" ricas del hemisferio norte. Peor para los ojos, pero básica para el estómago y los bolsillos, porque es el pulmón económico y parte del otro del país.

El lema del país y de su gente es Pura Vida. Eso desvela muchas claves. No es "seny", ni forca el canut, ni som 6 milions, jeje. Es un instinto vitalista y espóntáneo que invita a disfrutar de la existencia. Una filosofía pragmática y euforizante, superior a Kant y los presocráticos.
Dennis el conductor de buses turísticos decía que él sí que era un tico, palabra que designa a los costarricenses, un vividor de la vida y un amnésico del sufrimiento mental tal vez.

Es un país que no tiene ejército por Constitución. Olee. Y la verdad es que también sus gentes dan la sensación de vivir en paz, algo que mucha gente no sabe como conseguir en este mundo.
Sobre su naturaleza, qué decir. Es un paraíso. Es un país montañoso en medio del Caribe, y si éste ya es exuberante, la combinación de "montaña del Caribe" lo hace la pura exuberancia, que hasta los volcanes se salen de tanta, no la pueden contener : ) Y será así.

Hoy me recogen en 1 hora para ir en un día a Isla Tortuga. Llueve todos los días y quiero sol y mar, será mi primer baño en el océano Pacífico. Veremos si supera la idílica Isla Mujeres mejicana.
Como algunos habréis intuído tengo novia, algo inesperado y a la vez muy presentido. Estoy ilusionado y a la vez de pies en el suelo, y estoy feliz. 30 años dan para que el fruto coco de nuestra cabeza madure. Y bueno, que es una intensa época incidental para saborear y vivirla al máximo, escribir sentimientos, conocer gente, y disfrutar soñando despierto.

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