domingo, 14 de febrero de 2010

Cuántico y chorra

Estallar mi cobertizo de cristal
por un metorito de crueldad sanguinaria
Soltarse todas las cuerdas que sujetaban
mis pilares de cartón chapado.
Todas mis chuletas para una sola era.

No saber con tanto polvo tuyo dónde está,
el manual del siguiente período arquitectónico.
O el tendón que regenere esta invalidez.
Ni haber formado mozo de almacén alguno
que recorra mis salas apagadas y
los millones de recuerdos tapados.

Violar mi seno de porche americano
y cagarse en él con palabras que no entiendo,
pero que suenan a otros, y a un contramundo maligno.
No dimitir porque no tengo valentía para tanto
ni perder porque no tengo mucho a perder

No sé si éste es el mayor drama del mundo,
pero hoy mi chico me ha engañado
y por perder he perdido, hasta la hora del suicidio.

3 comentarios:

Mònica dijo...

Ay que romanticón!!! Publicando poemas en Sant Valentín...:D

Anónimo dijo...

Doncs està molt bé... es teu, no, jordi?

Yves

Jordi Santamaria dijo...

És meu, dels antibiòtics, i del vi de l´avió, tots ens som responsables :p