Hay una seguridad social cotizada en el lenguaje. La comunicación y la vida humana a veces son así de falsas y a la vez igual de eficaces como en el caso del adivino. Un iluminado que cree ver el futuro convence a un desgraciado que le da valor a esa mentira, consume ese matarratas de la verdad, y ambos se salvan por la seguridad social del lenguaje.
Esa estructura cuerda, que sustenta la lógica, y que permite maniobrar desde la mentira a la verdad. Ese esqueleto del sentido común que hace que todo quepa y nada se salga de madre, en un reset de cualquier filosofía.
A base de cotizar siglo tras siglo, el ser humano tiene un patrimonio en el lenguaje que permite cosas como el arte o el mero salvavidas de meterse en un tarotista y poder salir de él, lenguaje mediante, de analogía en analogía, de oca a oca cada vez más sana y cuerda, escapando de ese hechizo empático sometido.
El hombre es un heredero desagradecido de la biblioteca de Alejandría y de las 900 que le siguieron. Occidente es un vil perro muchas veces porque muerde la mano de sus antepasados. Resulta que aprovechamos el esfuerzo de dos mil años, de dos mil padres, y ni siquiera nos planteamos si estamos dejando un mundo mejor. Somos esos consumistas de dos mil años, apoltronados, tan poco estoicos, tan niños mimados, tan poco padres (natalidad estadística) y tan hijos herederos de tesoros. Nunca está de más ser agradecido, nunca está de más reconocer la dependencia corporal y cerebral de cientos de antepasados a la manera oriental. Lo que escribo suena a moralina, puede ser.
El lenguaje es aquella cantera milenaria forjada por anónimos y maestros literarios. Una empresa de padres a hijos que no cotiza en ningún Nasdaq o Ibex de turno, pero que es el vehículo para llegar a todos los sitios, arribar a la mentira y maniobrar para salir de ella.
Y hay una forma de vivir a crédito de Nietzsche, Umbral o Bécquer toda la vida, de aquellos que pavimentaron las calles del lenguaje por donde nos movemos, o aquellos que pavimentaron las calles de la ciencia, de la ingeniería o de lo textil. Siempre hay una seguridad social de la cultura, cotizada por otros, sin ningún copyright amasafortunas como la banda magnética de las tarjetas de crédito, sino donaciones generosas de antepasados ilustres o anónimos que han proveido los raíles, pilares y puentes donde se mantiene nuestro mundo. Traer un hijo al mundo es tal vez más fácil y deseado por ese regalo social del lenguaje en los otros.
martes, 20 de enero de 2009
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18 comentarios:
Cuando escuché las primeras palabras de mis hijos , sentí asombro , emoción y qué sé yo.. Pero Jordi, las sonrisas desde el primer mes me dejaban clavada mirándoles... El llanto avisa pero la sonrisa es algo tan expresivo ...
Hablarás de la sonrisa, Jordi?
Leo y releo tu escrito, tela!!!
Carmen, tengo que confesarte que leo tus comentarios con el mismo interés con el que leo el post de Jordi cada día, se han convertido en un tándem que me está provocando adicción...
Prefiero leeros que comentaros, que para eso ya estáis vosotros que lo hacéis infinitamente mejor...
Pero hoy no me he podido contener, me has hecho recordar uno de los momentos más especiales y únicos de mi vida, esa primera sonrisa de una hija (en mi caso), sabía que no la había olvidado pero quiero darte las gracias por desenterrar ese instante…
Muchos abrazos
Mónica, tú si que has sido un regalo para mí.. Estoy pasando unos días de cuidar más especialmente a una hija porque ha estado muy malita, y de pronto más allá de la máquina, y gracias a jordi, nos hemos llegado a sentir cerca... Todos los excursionistas nos ayudamos. También los que nos veís pasar y nos saludaís... Qué gozada!!!!
Bueno, ya se ve que la máquina me juega malas pasadas!!! Pero me alegro repetir tres veces lo que siento. !!!
Se ve, Carmen, que cotizas mucho a la SS del lenguaje, por esta triplicaciones comentariles, jaja!
Ni te lo imaginas, compañero!!!!
Pero que he puesto carmen!!!! Que n
A mí esto me puede!!!!
Y vuelve a wordpress naúfrago, te lo digo con el cuore!!!
Me alegro de estar con gente física y virtualmente que se ocupan de dar vida a alguien. Arcilla de vida, una empresa mucho más difícil y sacrificada que escribir o comprar empresas. (Bárbara tb sé que eres mamá).
Este blog se llama como se llama por aquella persona que me dio la vida, pudiendo hacer mil otras cosas más, cumplió su voluntad de madre todo el tiempo, y permitió que yo sea un hombre hecho y derecho.
Ella mañana cumple 68 años, y aunque no lea estas líneas, siempre estaré en deuda con Ella.
Mónica, eres una persona ejemplar porque eres capaz de ser madre, y muy buena, a pesar de no haber podido disfrutar de la tuya todo el tiempo, y eso es doble mérito. Hay gente que escribimos y plasmamos palabras más o menos bonitas, hay otra gente que pinta lo bonito con sus hechos una y otra vez.
; )
Pues sí, yo también soy mamá y me emociono leyendo estas cosas, recordando la primera sonrisa de Bruno, su primera palabra. Yo buscaba un centro de gravedad permanente (como el Battiato) y lo encontré en él.
Felicidades a Victoria por su cumpleaños y por haber criado a un hijo así.
Voy parriba a seguir leyendo.
Gracias Bárbara. Tu post sobre bondad-inteligencia dice mucho de ti por cierto (bis).
Gran concepto el centro de gravedad permanente. Yo tb lo busco. Hice un post sobre hacer nido, y creo q tiene q ver con ese centro di gr.
Quiero ver Fama en serie para ver de adulto (y de niño, era muy peke) a Bruno, Dani Amatulo y compañía, por cierto.
Qué le regalo a mi madre?
Pues si acompañas cualquier cosilla con una nota, así como escribes tú, le va a parecer el mejor regalo del mundo.
Eso o un viaje a las Sheychelles.
Carmen, paso de volver a Wordpress, que ahora estoy a gusto en Blogger. Pero si no tiene más complicación... Solo hay que elegir Nombre, en las opciones. O Anónimo y luego firmas Carmen y yastá. Felices 68, Victoria. Coño, por fin entiendo el nombre deste blog.
pero en word ya lo tenía siempre como Carmen, además era distinto, me gustaba. Pero bueno...
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